sábado, 2 de julio de 2011

Que el viento ...

No me gusta la tristeza... la trato de ahuyentar todos los días, pero en ocasiones se impregna como una capa gruesa y a ratos...a ratos, te extraño mucho.


Es como si todos los recuerdos se me arremolinaran... las cosas más bonitas, esas,  que ya no vuelven y que por eso,  son tristes y felices a la vez...

Escribir  me  tranquiliza.

 Mis pensamientos esparcidos en una hoja en blanco hacen que yo me sienta mejor, que me tranquilece , que pueda sonreir y que vuelva a replantear lo que antes era importante para mi.


Son estados de animo extraños, no me gusta llorar... quiero tener la capacidad de ser fuerte y replantear ... que el llanto se seque con el viento mientras trato de levantarme para seguir.