Acabo de cumplir un año, medio mes, haciendo ejercicio en el gimnasio… si ya sé, suena superficial, pero para mi es importante nombrarlo porque yo era de las que no duraba ni tres semanas con una rutina de por lo menos veinte minutos.
Por eso mi asombro… y hasta le he tomado cariño, al final se convierte en un hábito el hacerle un hueco a tu horario y a la larga lo disfrutas mucho … mi área favorita es la de cardio, no hay cosa que me agrade más, que treparme a la caminadora, suelo pasar mucho tiempo ahí, me agrada quizá, porque no es una coreografía ( soy pésima, descordino todo, el negrito en el arroz he dicho siempre) y creo que es un aparato muy noble y ejercitas prácticamente todos los músculos.
Pero bueno, también es cierto que al principio da flojera, agregarle todos los días el ejercicio… pero al final te sientes muy bien... está comprobado que al realizarlo produces de forma natural, endorfinas y serotonina( sustancias primordiales en el cerebro para no deprimirse) y también oxigenas al cerebro, es decir te encuentras más alerta ante cualquier circunstancia.
Claro, también sirve para curar mis remordimientos de todo lo que me trago el fin de semana … para eso también lo utilizo jajajaja; pero sí, en ocasiones es como una especie de terapia… puedes llegar preocupada, enojada, estresada… pero después de hacer ejercicio te sientes más relajada, más tranquila…Dalay, dirían algunos…
Y así ha pasado un año medio mes y ¡caray! el tiempo se me ha ido volando, es un poco superficial lo sé, pero tenía que escribir : ¡¡¡He cumplido un año en el gimnasio sin tirar la toalla!!! jajaja.