Me llamó la atención porque es mexicana , y porque
siempre pintan a las
escritoras todas simplonas, como si las mujeres que escriben, se les
fuera negada la belleza y fueran aburridas, sin
algún brillo de distinción.
Hablo de"Juana de Asbaje", mejor conocida, como Sor Juana Inés de la Cruz, que aseguran que era bella y
que gozaba de una gran inteligencia Un personaje
carismático, interesante y provocador
para su época.
Intelectuales respetados, la han admirado , estudiado y analizado , como Octavio Paz, en su ensayo de " Las trampas de la Fe"
Ella es la décima
musa, una mujer libertaria, nacida
quizá en tiempos equivocados, adelantada a su
época, muchos aseguran
que albergó unos 4 mil libros en su celda de meditación
para quien era indispensable la
pluma y el papel, y así ordenar
sus pensamientos, y
elaborar poemas y obras que
muchos tacharon de profanos y atrevidos.
Se dicen muchas cosas de ella, que no era religiosa, que sufrió mucho, que su padrastro la vejó , y que
por una decepción de amores, ingresó a la orden religiosa, pero que también, era una
de las formas por las cuales podía ampliar su conocimiento, porque para las mujeres del 1600 y pico, se les prohibía estudiar
en la Universidad. .
Otros muchos, aseguran, que se encontraba enamorada, de
un sacerdote muy sabio y escritores como Francisco Martín Moreno, autor de Arrebatos Carnales,
afirma que a Sor Juana, se encontraba enamorada de la Virreyna Condesa de Paredes, aunque muchos , han
tachado a Francisco Martín Moreno, de calumniador por dicha novela, en la que habla de muchos otros héroes mexicanos.
Sin embargo, José Luis Gómez, otro escritor que escribió una novela acerca de Sor Juana asegura que para estudiarla, se debe analizar desde tres perspectivas : su vida, su obra y su sexualidad.
Cierto, o falso, Sor Juana Inés de la Cruz, fue una mujer que trascendió a través del tiempo, en la actualidad es admirada por sus obras por su genio, considerada como una de las mejores poetizas de todos los tiempos y de hecho hay una Universidad súper conocida que lleva su nombre en honor a ella ¿sí la ubican? Sus instalaciones son preciosas y evocan a otro tiempo en donde en muchas ocasiones se organizan presentaciones de libros y actividades culturales.
Cierto, o falso, Sor Juana Inés de la Cruz, fue una mujer que trascendió a través del tiempo, en la actualidad es admirada por sus obras por su genio, considerada como una de las mejores poetizas de todos los tiempos y de hecho hay una Universidad súper conocida que lleva su nombre en honor a ella ¿sí la ubican? Sus instalaciones son preciosas y evocan a otro tiempo en donde en muchas ocasiones se organizan presentaciones de libros y actividades culturales.
Este es uno de sus poemas, quizá uno de los màs conocidos. Se los comparto :
Hombres necios que acusáis
a la mujer sin razón,
sin ver que sois la ocasión
de lo mismo que culpáis.
Si con ansia sin igual
solicitáis su desdén,
¿por qué queréis que obren bien
si las incitáis al mal?
Combatís su resistencia
y luego con gravedad
decís que fue liviandad
lo que hizo la diligencia.
Parecer quiere el denuedo
de vuestro parecer loco
al niño que pone el coco
y luego le tiene miedo.
Queréis con presunción necia
hallar a la que buscáis,
para pretendida, Tais,
y en la posesión, Lucrecia.
¿Qué humor puede ser más raro
que el que, falto de consejo,
él mismo empaña el espejo
y siente que no esté claro?
Con el favor y el desdén
tenéis condición igual,
quejándoos, si os tratan mal,
burlándoos, si os quieren bien.
Opinión ninguna gana,
pues la que más se recata,
si no os admite, es ingrata,
y si os admite, es liviana.
Siempre tan necios andáis
que con desigual nivel
a una culpáis por cruel
y a otra por fácil culpáis.
¿Pues cómo ha de estar templada
la que vuestro amor pretende,
si la que es ingrata ofende
y la que es fácil enfada?
Mas entre el enfado y pena
que vuestro gusto refiere,
bien haya la que no os quiere
y queja enhorabuena.
Dan vuestras amantes penas
a sus libertades alas
y después de hacerlas malas
las queréis hallar muy buenas.
¿Cuál mayor culpa ha tenido
en una pasión errada:
la que cae de rogada
o el que ruega de caído?
¿O cuál es más de culpar,
aunque cualquiera mal haga:
la que peca por la paga
o el que paga por pecar?
¿Pues para qué os espantáis
de la culpa que tenéis?
Queredlas cual las hacéis
o hacedlas cual las buscáis.
Dejad de solicitar
y después con más razón
acusaréis la afición
de la que os fuere a rogar.
Bien con muchas armas fundo
que lidia vuestra arrogancia,
pues en promesa e instancia
juntáis diablo, carne y mundo
sin ver que sois la ocasión
de lo mismo que culpáis.
Si con ansia sin igual
solicitáis su desdén,
¿por qué queréis que obren bien
si las incitáis al mal?
Combatís su resistencia
y luego con gravedad
decís que fue liviandad
lo que hizo la diligencia.
Parecer quiere el denuedo
de vuestro parecer loco
al niño que pone el coco
y luego le tiene miedo.
Queréis con presunción necia
hallar a la que buscáis,
para pretendida, Tais,
y en la posesión, Lucrecia.
¿Qué humor puede ser más raro
que el que, falto de consejo,
él mismo empaña el espejo
y siente que no esté claro?
Con el favor y el desdén
tenéis condición igual,
quejándoos, si os tratan mal,
burlándoos, si os quieren bien.
Opinión ninguna gana,
pues la que más se recata,
si no os admite, es ingrata,
y si os admite, es liviana.
Siempre tan necios andáis
que con desigual nivel
a una culpáis por cruel
y a otra por fácil culpáis.
¿Pues cómo ha de estar templada
la que vuestro amor pretende,
si la que es ingrata ofende
y la que es fácil enfada?
Mas entre el enfado y pena
que vuestro gusto refiere,
bien haya la que no os quiere
y queja enhorabuena.
Dan vuestras amantes penas
a sus libertades alas
y después de hacerlas malas
las queréis hallar muy buenas.
¿Cuál mayor culpa ha tenido
en una pasión errada:
la que cae de rogada
o el que ruega de caído?
¿O cuál es más de culpar,
aunque cualquiera mal haga:
la que peca por la paga
o el que paga por pecar?
¿Pues para qué os espantáis
de la culpa que tenéis?
Queredlas cual las hacéis
o hacedlas cual las buscáis.
Dejad de solicitar
y después con más razón
acusaréis la afición
de la que os fuere a rogar.
Bien con muchas armas fundo
que lidia vuestra arrogancia,
pues en promesa e instancia
juntáis diablo, carne y mundo
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